Existe una cantidad considerable de evidencia que respalda la efectividad de tratar los trastornos por uso de sustancias (TUS) en el idioma y la cultura nativa del individuo. Este enfoque puede llevar a mejores resultados en el tratamiento debido a varios factores clave:

  1. Mejora en la Comunicación y Comprensión

Brindar tratamiento en el idioma nativo de una persona mejora la comunicación, permitiendo una comprensión más clara de las necesidades, emociones y experiencias del paciente. Las malinterpretaciones que podrían surgir debido a las barreras del idioma se minimizan, lo que genera una mejor relación entre el paciente y el terapeuta, aspecto crucial para un tratamiento efectivo. Los estudios han demostrado que cuando la terapia se lleva a cabo en el idioma nativo de individuos de comunidades inmigrantes o minoritarias, es más probable que participen en el proceso y sigan las recomendaciones, lo que resulta en mejores resultados a largo plazo.

  1. Competencia Cultural y Relevancia

La competencia cultural se refiere a la capacidad de los proveedores de atención médica para entender, respetar y abordar los contextos culturales de los pacientes. Un tratamiento que se alinee con los valores y prácticas culturales del paciente puede crear un entorno más favorable.

Muchos trastornos por uso de sustancias están influenciados por creencias, normas y valores culturales. Abordar estos factores culturales dentro del programa de tratamiento permite a los proveedores adaptar las intervenciones a las experiencias vividas del individuo. Por ejemplo, incorporar mecanismos de afrontamiento específicos de la cultura, el apoyo comunitario o las estructuras familiares en la terapia puede mejorar la efectividad de la intervención.

Un estudio de 2017 publicado en el Journal of Substance Abuse Treatment encontró que las intervenciones culturalmente adaptadas para poblaciones latinas fueron más efectivas que aquellas no adaptadas, especialmente en cuanto a la participación de los clientes y la mejora de las tasas de retención en la terapia.